- De 63.7 por ciento que la recibía en 2021, cayó en 39.1 por ciento en 2023, lo que significa una caída de 24.6 por ciento, de las más drásticas del país
- En cobertura, la entidad se encuentra dentro de la media nacional, pero en disponibilidad para la población urbana es de las más afectadas por la sequía
Según la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental del INEGI, elaborada en 2023 y publicada apenas ayer, la disponibilidad de agua potable para la población urbana del país, con servicio constante de agua potable, bajó de 62.4 por ciento en 2019, a 57.7 por ciento en 2021, y 52.3 por ciento en 2023, y nueve estados redujeron el abasto constante de agua potable de 2021 a 2023, entre ellos Hidalgo, además de Puebla, Guanajuato, Quintana Roo, Yucatán, Veracruz, Tamaulipas, Nuevo León y Chihuahua.
Hidalgo solo tiene 39.1 por ciento de población que refiere la recibe de forma constante, cuando en 2021 era de 63.7 por ciento, lo que representa una disminución de 24.6 por ciento, de las más pronunciada del país.
Asimismo, de acuerdo con el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO), al cierre de febrero de este año, 69 por ciento de la población en México padeció algún tipo de sequía, “lo que amenaza no solo la disponibilidad, sino la calidad del agua”.
A propósito del Día Mundial del Agua, que se celebra mañana 22 de marzo, y de acuerdo con el estudio “Situación del subsector agua potable, alcantarillado y saneamiento”, elaborado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Hidalgo tiene 96 por ciento de cobertura de agua potable, y 95.1 en el servicio de alcantarillado; por lo que, 4.0 por ciento de su población (121 mil 969 hidalguenses), no cuentan con el vital líquido en sus hogares, y 4.9 por ciento (150 mil 421 hidalguenses) carecen de servicio de drenaje; estadísticas que están muy cerca de la media nacional, que es de 96.1 por ciento para el agua potable, y 95.2 por ciento en lo que toca a alcantarillado.
En cuanto a la evolución en la cobertura del servicio de agua potable por entidad federativa, la entidad tuvo un crecimiento exponencial de 1990 a 2020 (último año del Censo de Población y Vivienda que elabora el INEGI); y pasó de 64.4 por ciento en 1990 a 79.5 en 1995, 83.9 en 2000, 87.2 en 2005, 90.7 en 2010, 94.1 en 2015, y 96.0 en 2020.
Los estados más rezagados en cobertura del servicio de agua potable, son: Guerrero, con 88.1 por ciento; Oaxaca, con 88.9; y Oaxaca, con 89.8 por ciento de cobertura.
Aunque es preciso aclarar que una cosa es tener la cobertura y otra la disponibilidad, rubro en el que Hidalgo es de las entidades más castigadas del país.
